CLAVES PARA SUPERAR UNA RUPTURA
He ahí la cuestión...
Con el simple hecho de buscar esta frase en Google, ya te das cuenta de que debe ser algo bastante complicado, doloroso y sobre todo... largo, muy largo.
85.200 resultados aparecen como logro de tu búsqueda, es decir, que todos en un momento de desesperación buscamos ayuda para esa interminable lista de sensaciones, sentimientos, lágrimas y momentos agónicos en los que no tenemos ni idea de cómo afrontar la ruptura con nuestra pareja.
Lo ideal sería poder "quedar como amigos", pero esto sólo funciona cuando los dos de mutuo acuerdo han decidido que al final, esa relación no iría a ninguna parte. La versión de "quedar como amigos" cambia totalmente si es uno es que toma la decisión de romper y el otro se queda hecho polvo.
ETAPAS POR LAS QUE PASAMOS ANTE UNA RUPTURA
Etapa de shock
Al principio no te lo crees, te quedas en estado de shock, te pasas el día entero pensando en ello y recordando cada palabra que dijo en el momento de la ruptura. Vives esa situación una y otra vez. Te preguntas ¿por qué?.
Consejo: rodéate de amigos y familia, habla con ellos, desahógate, llora todo lo que tengas de llorar, no te reprimas, ese veneno que te queda dentro al final te pasa factura.
Etapa de realidad
Asumes la ruptura, pasas por una etapa de dolor, pena, desesperación, culpa... Sólo pensamos que nunca lo superaremos, que no podemos vivir sin nuestra pareja. Preguntas como: ¿Voy a volver a encontrar a alguien?, ¿Se volverá a fijar alguien en mí?, ¿Cómo voy a vivir sin él?.
En este momento nos sentimos feas, gordas, viejas, nos vemos más defectos que nunca, más arrugas en el espejo y no queremos salir de nuestra casa. Claro que todos estos pensamientos son normales si nos hemos tirado la mayoría del tiempo llorando, metidas en la cama y sin ganas de ver a nadie. Lo único que queremos es que nos dejen en paz, queremos vivir nuestro dolor como si fuera una manera de seguir unidas a esa pareja que nos ha destrozado el corazón.
Todo nos recuerda a esa persona, canciones, fotografías, películas, comidas, olores, es normal, hemos pasado mucho tiempo junto a ella.
Consejo: por mucho que te cueste debes levantarte cada mañana, pintarte, arreglarte, ponte la ropa que más te gusta, regálate algún capricho, realiza actividades que te gustan, vete al cine, a la peluquería, queda con tus amigas y conoce gente nueva, el hecho de empezar nuevas amistades te da una visión diferente de las relaciones personales.
Hazte usuaria de alguna red social, inserta tu mejor foto, recibir mensajes o comentarios te subirá el ánimo y sobre todo la autoestima (esa que llevamos arrastrando desde que ocurrió), te darás cuenta que hay mucha gente en tu misma situación (consuelo de muchos, consuelo de tontos... pero ayuda) y sobre todo que se interesan por ti.
Tenemos que evitar el impulso de ir a esos sitios donde podemos encontrarlo, de llamadas telefónicas en momentos de desesperación o lo típicos mensajitos del móvil diciéndole que no puedes vivir sin él, que te encuentras fatal y haciéndole sentir pena por cómo te encuentras. Lo único que conseguirás será una serie de frases en las que te darás cuenta de lo patética que eres.
Etapa de descontrol
Superada en parte la fase anterior, esta etapa es un poco peligrosa. Salimos a todas horas, queremos comernos el mundo y disfrutar de esa libertad que ahora tenemos, es como si quisiéramos recuperar todo el tiempo perdido, el que hemos perdido con nuestro ex y el que hemos perdido llorando y compadeciéndonos.
Consejo: piensa bien con la cabeza, la mayoría de los días volverás a casa con la sensación de vacío, las situaciones se superan con el tiempo (inevitablemente)
No se puede superar todo en dos días, es imposible, son muchos los recuerdos que todavía nos invaden y en algunos casos nos comportamos en esta etapa con la idea de vengarnos por el daño que nos han hecho, nos dejamos caer en los brazos del primero que encontramos para poder olvidarlo cuando en realidad lo único que haremos será hacer comparaciones ridículas sin olvidar que nos pueden usar y tirar y volveremos a la etapa anterior.
Etapa de tranquilidad
Aquí nos volvemos a encontrar a nosotras mismas, empezamos a disfrutar de nuestros momentos de soledad, a querernos más, nos damos cuenta de que gozamos de una libertad en la que podemos decidir qué hacemos con nuestra vida. Nos cuestionamos qué es realmente lo que buscamos en una pareja, qué es verdaderamente lo que nos hace felices y reflexionamos con claridad sobre los motivos de nuestra ruptura.
¿COMO AFRONTAR LAS ETAPAS DE LA RUPTURA?
Superar una ruptura siempre es doloroso, no podemos pretender superarlo todo en dos días. El tiempo y la distancia pueden ser tus mejores aliados para darte cuenta de los motivos reales de esa ruptura.
"Dale tiempo al tiempo"
No te atormentes con lo que pudo o no pudo ser. No pienses en lo que has hecho mal o lo que hubieras podido hacer mejor. Ya está hecho y lo mejor que podemos hacer es enfrentarnos a ello, afrontar nuestro dolor y mirar hacia delante con optimismo, autonomía y libertad.
No intentes depender de esa persona. No puedes seguir alargando esos lazos de unión para que todo vuelva a ser como antes. Si esa persona te ha dicho que no quiere esa relación contigo debería ser esa persona también la que se diera cuenta de que quiere volver. Asúmelo y acostumbra a realizar sola todas esas cosas que antes hacía él o hacíais juntos.
Haz una lista de todas esas cosas que no te gustaban de él, a veces ayuda, intenta mirarlo desde fuera, sé objetiva y haz otra lista con todas las virtudes que crees que tú tienes, a veces ayuda también escribir un diario, plasmar en un papel todos los sentimientos que te recorren a lo largo del día, puede ser una forma de sacarlos afuera.
El pasado no puedes cambiarlo así que no te atormentes con lo que podrías haber hecho o si pudieras volver atrás, porque no puedes. Pensamientos como, si yo no hubiera trabajado tanto, si me hubiera dado cuenta de que no era feliz, si me hubiera arreglado más, si hubiera..., si hubiera..., si hubiera..., no puedes cambiarlo así que no sirve de nada que sigas castigándote, las relaciones terminan por mutuo acuerdo o por decisión de uno de ellos y si este es tu caso lo que tienes que hacer es mirar al futuro, creer que eres una chica estupenda, quedarte con lo más bonito de la relación y pensar en que si esto ha ocurrido es que este chico no era para ti y que el amor de tu vida sigue buscándote y tienes que encontrarlo.
La vida da muchas vueltas, ¿Qué te voy a contar a ti verdad?, y a la vuelta de la esquina siempre nos espera esa persona que nos hace volver a creer en el amor y llenarnos de ilusiones.
Paciencia, paciencia, ya nos tocará...