La historia de Tuenti arranca en 2006, cuando su fundador, el californiano Zaryn Dentzel decide establecerse definitivamente en España y adelantarse al aún relativamente poco conocido Facebook creando una red social de un estilo similar a la de Zuckerberg.

HISTORIA DE LA RED SOCIAL TUENTI

¿Por qué el nombre de 'Tuenti'?: Viene de 'tu entidad', tus amigos, tu entidad.

Tuenti.com fue una red española con la que se pretendía retomar o mantener el contacto con antiguos compañeros del colegio o instituto. Estas estructuras de amigos nacen con la creación de la web classmates.com.

En 2002 empiezan a aparecer otras páginas de círculos de amigos, que se popularizarán de la archiconocida MySpace, en el año 2003.

A partir de ese año las redes sociales crecieron a un nivel espectacular, hasta llegar a casos como el de Tuenti, una enorme comunidad virtual de amigos que no paró de crecer. Y no fue cuestión de jóvenes de 20 años, había todo tipo de edades.

Tuenti se convirtió en la red social online de moda en España

Zarym Dentzel, Félix Ruiz y Rupert Van Milligen ¿Quiénes son?

Podría decirse que son, como en aquellos manidos y típicos chistes, un norteamericano, un malagueño y un londinense, pero en esta historia, al final, no se cuenta una gracia, sino una historia de gente que supo llegar a otros con su creatividad y trabajo, y crearon una de las redes sociales más importantes en España.

Zarym Dentzel, norteamericano, vivía en Madrid y trabajó en Google España como director de marketing en todo el ámbito nacional. Dominaba el castellano y como puede comprobarse, la creación de redes sociales en Internet.

Zaryn Dentzel tenía una experiencia previa en el campo de las redes sociales. A los 21 años ya creó en Estados Unidos Essembly, una red social política, con un cierto cariz antisistema. "Estaba fascinado por la política, quería dar voz a la gente". La cosa no funcionó.

A los 15 años llegó a Cabeza del Buey, Badajoz, para pasar un año con una familia española. Poco después conoció en la costa andaluza a Félix, otro de los cinco fundadores de tuenti.

Californiano, de Santa Bárbara, Dentzel estudió Literatura Española y Relaciones Internacionales, pero el mundo de las nuevas tecnologías siempre le fascinó. "La tecnología puede ser muy útil para las personas, pero hay que hacer un esfuerzo por entender a las personas", explicaba.

Sus padres eran artistas. Y de ellos, dice, ha heredado la vocación de crear. "Valoro el arte de hacer cosas interesantes en vez de ganar dinero". Su resistencia a abrir Tuenti a los formatos publicitarios más invasivos ha sido una de las claves del éxito del proyecto hasta la fecha. Arrancaron gracias al medio millón de euros que consiguieron reunir los cinco fundadores recurriendo a familiares y amigos.

Sus antepasados se dedicaban a construir carruseles en Alemania, una vieja tradición que su padre retomó con entusiasmo. Su madre se dedica a la pintura.

Zaryn aseguraba sin dudas que su autor favorito en lengua española es Gabriel García Márquez, pero que ahora ya no lee: vuelve a casa con los ojos rojos de tanto mirar la pantalla.

Félix Ruiz se encargaba del marketing de Tuenti. Este malagueño de 26 años, uno de los cinco fundadores, sacó buen provecho de su experiencia como relaciones públicas de discotecas. Ese trabajillo que compatibilizaba con sus clases de Empresariales le dio una clave. Había que crear un sitio exclusivo. Al que la gente deseara entrar. Pero de difícil el acceso. Como un club de élite. Desde un principio, cuenta, intentó incorporar a unas mil personas de "alto poder adquisitivo", con gran mayoría de chicas y, todo, "gente guapa". La voz empezó a correr.

PRIVACIDAD

Al contrario que en otros sitios de intercambios sociales, en Tuenti los usuarios se registraban y tenían un perfil donde estaban recogidos su nombre y apellidos reales, confiados en una privacidad que otros portales no tenían.

Y es que solo se podía acceder y registrarte mediante invitación. Después, el recién llegado dispondrá de una serie de invitaciones para que haga lo propio con los amigos que crea conveniente.

Esta característica es un rasgo diferencial que Tuenti con respecto a otros portales de relaciones como Facebook o MySpace, y hace que la gente se relacione de forma más auténtica, basándose en mayores dosis de credibilidad ante los demás, lo que sin duda es un valor añadido.

En la página se podía hacer un perfil para que lo vean los amigos, colgar fotos, comentarlas, compartirlas, enviar mensajes, anunciar e informar de eventos o buscar amigos o usuarios, entre otras posibilidades.

Al contrario que en otros portales, en Tuenti no había publicidad ni aplicaciones que interrumpan la comunicación entre usuarios, y se puede considerar, en base a estos criterios, una página limpia, dinámica y cómoda.

La empresa afirmaba que "Tuenti es la traducción a Internet de los círculos de amigos" y que "es fundamental que el usuario se sienta plenamente protegido en cuanto a la privacidad de sus datos personales y mantenga el control de quién accede a qué contenidos".

La fórmula fue un éxito en España.